Imagen de la Virgen de Valencia.
Es nuestro informante Raúl Gutiérrez, de Zurita, quien amablemente completa nuestra información sobre la sierra de la que venimos hablando, esta vez desde la perspectiva de su localidad. Empezamos hablando nuevamente de la Virgen de Valencia: nos sorprende Raúl con la mención de una leyenda habitual vinculada a las apariciones marianas en Cantabria y, en general, de toda España, referida a la Virgen de Valencia y que Carmen González Echegaray no menciona en su completa obra sobre este tema. La leyenda nos cuenta, según Raúl, que la Virgen, una vez que su imagen se trasladó tras el hallazgo en el tronco quemado al pueblo cercano, no conforme con el lugar donde se proyectaba edificar su iglesia, trasladaba por la noche milagrosamente las piedras que los carreteros depositaban en dicho lugar, precisamente al sitio que hoy ocupa la obra barroca, más querido por la Virgen, entonces en la ladera de un monte. Este tipo de "traslados" misteriosos ya los analizamos en un artículo publicado en la Revista de Folklore como pertenecientes al fondo mitemático céltico, por lo que no vamos a volver sobre el tema.
Hablando después sobre las construcciones en turba o tierra que comentamos en un post anterior, nos concretaba Raúl que se trataba de cabañas temporales, hechas para refugio de los ganados en los seles de las cumbres. El caso de la cabaña "vividora" de Vioño que comentamos bien pudo ser un caso excepcional por la pobreza de la familia en cuestión. En tiempos remotos, antes de la construcción de cuadras en el monte con piedra (en la época de Raúl llegó a haber hasta diez), esta fórmula pudo estar muy extendida por la zona, pero su destino -al menos en tiempos recientes- era el albergue del ganado y no tanto de los pastores, que, por la cercanía del sel a sus viviendas, no necesitaban pernoctar en ellas.
Raúl nos mencionó también un topónimo, la fuente o el lugar de "Quizuti", curiosamente parecido al topónimo "Bizute", lugar donde tradicionalmente se localizó la aparición de la Virgen "Quemada", si bien nos advirtió que no se trataba del mismo espacio, encontrándose a una buena distancia del anterior. Esta fuente se secó tras la plantación del eucaliptal, como otras. En las inmediaciones de este lugar, cerca del origen del Arroyo de San Pedro, pudo existir una mota altomedieval (en otra ocasión abordaremos una visión alternativa de este yacimiento) que, recuerda Raúl, atrajo hace años la atención de algunos miembros del grupo de defensa del Patrimonio ALCEDA (https://www.arqueologiamedieval.com/noticias/10291/descubiertos-en-zurita-de-pielagos-los-restos-de-una-fortificacion-medieval-cantabria).
Marina Gurruchaga Sánchez
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