ENCUENTROS CON EPANE

Epane, Epona, es una diosa céltica trifuncional (como Morrigan, Rhiannon, Macha), asociada a la guerra, la fertilidad y la soberanía. Vinculada al caballo, elemento de prestigio de las élites ecuestres del Hierro, es también deidad psicopompa, ayudante del paso al inframundo. En las estelas vadinienses, en efecto, la imagen de este animal preside la inscripción de recuerdo del difunto. Nuevamente la feraz recopilación de J. García Preciado de los cuentos y leyendas de la tradición oral de Cantabria, nos muestra (Relatos mitológicos y creencias mágicas, vol. II, pp. 85-86) un elocuente episodio ("La muchacha vestida de blanco...") en el que una joven de tal guisa se deja ver en ocasiones, montada en un caballo también blanco, durante la madrugada, caballo que luego es nuevamente avistado, esta vez solo. Y en una cima presidida por una cabaña pasiega, se escuchan de cuando en cuando caballos que pasan, haciendo un estruendo como de cadenas. También puede uno tropezarse con un caballo, igualmente blanco, que deja a quien lo vislumbra privado temporalmente del don del habla. Todo son imágenes de la respuesta ante la pavorosa cercanía del Sidh, el Más Allá, en los tiempos liminales de la noche y el crepúsculo; la pérdida del habla es también una prefiguración del comportamiento del difunto (también durante un avistamiento de la Santa Compaña, trasunto modernizado de la Caza Salvaje, el infeliz espectador no debe expresar palabra, so pena de quedar englobado en la eterna peregrinación).